martes, 17 de noviembre de 2009

Ética

En cualquier carrera es frecuente toparse con grandes retos, uno de ellos podría ser una tarea extensa, pero debemos analizar el propósito de las tareas, las tareas aun que muchos les hemos dado un sentido erróneo pensando que son cosas que tienes que entregar para aprobar el semestre, obstáculos cosas que el maestro planea para molestarnos, en verdad las tareas son para que nuestros conocimientos aprendidos en el aula sean reforzados o aplicados, una respuesta para estos grandes retos es buscar la tarea en internet, copiarla, pegarla y entregarla como nuestra, pero debemos darnos cuenta de que de esa forma la tarea pierde toda su utilidad, y aunque pasamos la materia en algunos casos no se logró en su totalidad y no se llevó como debía ser. No podemos decir que no es fácil y hasta agradable copiar y pegar algo para tener toda la tarde libre, pero si lo hacemos asi se pierde incluso el sentido de ir a la universidad, el cual no es ir a conseguir puntos como si de un concurso se tratara.

Nuestro mundo es difícil y para afrontarlo hay que tener conocimiento, pero la universidad en un sentido puro es para aprender, seria hermoso si todos pudiéramos ir a la universidad a aprender lo que nos causa curiosidad, pero en este mundo debemos aprender armas para defendernos. Estas armas no se logran si tomamos la escuela como algo que se tiene que pasar, un concurso donde se tiene que tener cierto número de puntos de la forma que sea, se trata de aprender, incluso aprender a recolectar información y aunque internet es una herramienta poderosísima, no es un archivo de tareas hechas. Tenemos que ver que esperamos de la universidad, aprender por el hecho de aprender o ganar por el hecho de lograr la mayor cantidad de puntos al costo que sea.
Harim Salazar, FES-Aragón-UNAM

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